Job 23
2 Hoy también hablaré con amargura;
Porque es más grave mi llaga que mi gemido. 3 ¡Quién me diera el saber dónde hallar a Dios!
Yo iría hasta su silla. 4 Expondría mi causa delante de él,
Y llenaría mi boca de argumentos. 5 Yo sabría lo que él me respondiese,
Y entendería lo que me dijera. 6 ¿Contendería conmigo con grandeza de fuerza?
No; antes él me atendería. 7 Allí el justo razonaría con él;
Y yo escaparía para siempre de mi juez. 8 He aquí yo iré al oriente, y no lo hallaré;
Y al occidente, y no lo percibiré; 9 Si muestra su poder al norte, yo no lo veré;
Al sur se esconderá, y no lo veré. 10 Mas él conoce mi camino;
Me probará, y saldré como oro. 11 Mis pies han seguido sus pisadas;
Guardé su camino, y no me aparté. 12 Del mandamiento de sus labios nunca me separé;
Guardé las palabras de su boca más que mi comida. 13 Pero si él determina una cosa, ¿quién lo hará cambiar?
Su alma deseó, e hizo. 14 Él, pues, acabará lo que ha determinado de mí;
Y muchas cosas como estas hay en él. 15 Por lo cual yo me espanto en su presencia;
Cuando lo considero, tiemblo a causa de él. 16 Dios ha enervado mi corazón,
Y me ha turbado el Omnipotente. 17 ¿Por qué no fui yo cortado delante de las tinieblas,
Ni fue cubierto con oscuridad mi rostro?
Reina-Valera 1960 ® © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988. Utilizado con permiso. Si desea más información visite americanbible.org, unitedbiblesocieties.org, vivelabiblia.com, unitedbiblesocieties.org/es/casa/, www.rvr60.bible